MI VIDA A TRAVÉS DEL TIEMPO (1ª PARTE)


Puede que envejecer sea una cosa natural, pero cuando nacemos y vamos creciendo y tenemos uso de razón a esa edad no podemos ni imaginar las cosas que nos pueden suceder- buenas y malas- a lo largo de nuestra vida.

Nuestros padres son los que ponen la primera piedra ya que con su esfuerzo y buen hacer nos buscan los mejores colegios para nuestra educación. allí empezamos a aprender las primeras letras, hacemos los primeros amigos y jugamos en grupo relacionándonos unos con otros, así vamos creciendo en todos los niveles. Todo esto no lo sé por experiencia propia, lo sé porque he criado dos hijas y de tal forma han sido los pasos. A mí sí que me hubiese gustado que con migo fuera así  pero nací en tiempos muy difíciles.

Nací entre los años cuarenta y cincuenta y hasta los cinco años viví con mis abuelos maternos en el campo. Al cumplir  los cinco fui a vivir con mis padres a la población pero eso no mejoró mi aprendizaje y formación pues por aquel entonces las escuelas dejaban mucho que desear. Mí padre fue de guarda al cortijo donde estaban mis abuelos y ahí se esfumaron mis esperanzas como estudiante y empezaron mis obligaciones como trabajador:  a los once años llegó el tiempo de la poda de la viña, en ese momento el encargado de la finca habló con mí padre diciéndole si quería que yo empezara a trabajar. Mí padre, no sé si por egoísmo o porque pensaba que esa debía de ser mi educación, aceptó; así empecé mi primer trabajo recogiendo la leña que los podadores dejaban por el suelo al podar la viña.

                                                                                        Vicente García _ Consuegra Borondo

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